Un mapa turístico en transformación
De acuerdo con la Organización Mundial del Turismo (OMT), México se mantiene como el país más visitado de América Latina gracias a destinos consolidados como Cancún, Ciudad de México y Los Cabos. República Dominicana ocupa el segundo lugar, con 11,2 millones de visitantes en 2024 y un sólido auge en cruceros que la convierte en referente del Caribe.
Sin embargo, la gran sorpresa de 2025 proviene de dos naciones que han sabido reinventarse: Colombia y El Salvador, que alcanzaron juntas un récord de 6,7 millones de visitantes internacionales, consolidándose como los motores de crecimiento turístico de la región.
Colombia: entre negocios y cultura
Colombia se afianza como un destino clave en Sudamérica. Ciudades como Cartagena, Medellín, Cali y Bogotá combinan historia, cultura y gastronomía con un creciente protagonismo en el turismo de negocios. Solo en 2024, el país recibió cerca de siete millones de visitantes internacionales, y este impulso contribuyó a un aumento del 2,7 % en su PIB durante el primer trimestre de 2025, superando con holgura el promedio global del 1,1 %.
El atractivo colombiano radica en su diversidad: playas caribeñas, arquitectura colonial, selvas amazónicas y una vibrante oferta urbana que la posiciona en el radar de viajeros internacionales y grandes inversionistas.
El Salvador: el milagro turístico del surf
El caso de El Salvador es aún más sorprendente. En 2025, el país registró un crecimiento del 81 % en la llegada de turistas internacionales y más del 200 % en ingresos turísticos. La clave ha estado en una combinación única: una estrategia de seguridad que ha transformado la percepción del país y la apuesta por el surf y la aventura como estandartes de su oferta internacional.
Playas como El Tunco y Punta Roca se han convertido en epicentros globales de este deporte, atrayendo tanto a atletas como a amantes del turismo de naturaleza.
Una alianza que trasciende fronteras
El auge turístico ha venido acompañado de una mayor cooperación entre ambos países. Empresas colombianas han invertido en El Salvador en sectores como el financiero, hotelero, textil y de vivienda, fortaleciendo el desarrollo económico compartido. Asimismo, el uso de plataformas digitales y la profesionalización en servicios turísticos han elevado el estándar regional.
Turismo y economía: dos motores sincronizados
Mientras el turismo muestra cifras alentadoras, el panorama económico latinoamericano mantiene contrastes. Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la región crecerá un 2,2 % en 2025, con Argentina, Panamá y Paraguay entre los líderes. En cambio, México muestra la proyección más débil, con apenas un 0,3 %.
Colombia crecerá un 2,5 % y El Salvador un 2,4 %, cifras moderadas pero enmarcadas en un contexto donde el turismo se revela como una herramienta vital de diversificación económica y proyección internacional.
El futuro del turismo latinoamericano
El renacer de Colombia y El Salvador confirma que el turismo es mucho más que una industria: es un instrumento de diplomacia, modernización y crecimiento sostenible. En un mundo donde los destinos compiten por experiencias auténticas, estas dos naciones han logrado demostrar que con visión estratégica, innovación y seguridad se puede conquistar no solo visitantes, sino también confianza global.