Un gesto romántico que corona una historia de amor tejida desde la adolescencia y fortalecida con el paso del tiempo.

Frente a las aguas turquesas del mar Mediterráneo, en la cálida atmósfera de un atardecer ibicenco, Paulo Londra decidió sellar uno de los momentos más significativos de su vida: pedirle matrimonio a su novia, Martina Quetglas. La escena, inmortalizada a bordo de un elegante yate, no solo plasmó un instante de amor profundo, sino que también simbolizó la madurez emocional de una pareja que ha sabido reencontrarse, crecer y apostar por un futuro compartido.

El artista cordobés, autor de éxitos como “Adán y Eva”, eligió un escenario paradisíaco para dar el gran paso. Martina, conmovida hasta las lágrimas, compartió en redes sociales el emotivo momento, acompañando las imágenes con palabras cargadas de ternura y gratitud:

“No fue un viaje cualquiera, fue el viaje que siempre soñé... decir ¡SÍ, QUIERO!”.

En su mensaje, destacó la admiración y el amor que siente por Londra, a quien considera su compañero de vida, protector y cómplice.

“Gracias por hacerme sentir segura, por superar mis expectativas cada día... SÍ quiero pasar toda la vida con vos, mi Pau, mi persona favorita en este mundo”, escribió con el corazón expuesto.

La respuesta del músico no tardó en llegar:

“Te amo, reina. Sos la mujer de mi vida. Siempre juntos con Dios, intentando ser mejores cada día”.

Una historia que empezó en las aulas

Más allá del glamour de la propuesta, lo que hace aún más entrañable esta unión es su origen: Paulo y Martina se conocieron en la secundaria. Lo que en su momento fue una relación escolar se transformó, años después, en un lazo maduro y consciente. En 2022, luego de su separación de Rocío Moreno —madre de sus dos hijas— Londra volvió a cruzarse con Martina en un evento de exalumnos, y ese reencuentro cambió sus vidas.

El propio cantante lo expresó en una entrevista con honestidad:

“La amo y me encanta la relación que tenemos... Nos reencontramos ya de grandes, sabiendo valorar más las cosas”.

Desde entonces, han compartido su historia con naturalidad en las redes: viajes por montañas y playas, paseos en pareja, momentos familiares y hasta una apasionada presencia en Qatar durante el Mundial, alentando juntos a la Selección Argentina. Martina, que cumplió 25 años el pasado abril, ha sido una presencia constante y luminosa en la vida del músico, acompañándolo tanto en lo cotidiano como en sus logros profesionales.

Un paso hacia el futuro

La propuesta de matrimonio no solo celebra el presente, sino que abre un nuevo capítulo para Paulo y Martina. En un mundo donde las relaciones expuestas al ojo público muchas veces flaquean, su historia se destaca por su autenticidad y la voluntad de construir un amor que trascienda los reflectores.

Entre versos de trap, giras internacionales y momentos íntimos a bordo de un yate en el Mediterráneo, Paulo Londra reafirma que el verdadero éxito no siempre se mide por los aplausos del escenario, sino por la mirada cómplice de quien elige quedarse, día tras día, a su lado.