El portal de clasificados de real estate Plusvalía comparte recomendaciones clave para propietarios que buscan alquilar rápido, con seguridad y al mejor precio posible.

En el mercado inmobiliario ecuatoriano, ciertas épocas del año —como el verano, el inicio de clases o feriados prolongados— generan un aumento en la demanda de alquileres. Esta temporada alta representa una gran oportunidad para propietarios que desean rentabilizar sus inmuebles. Por eso, preparar adecuadamente una propiedad antes de publicarla puede marcar la diferencia entre alquilar rápido o quedar fuera del radar de los interesados.

1. Fija un precio  que defina el valor real de tu propiedad

Uno de los errores más comunes es establecer un valor fuera de mercado. Esto puede reducir el interés y prolongar el tiempo de vacancia. Apoyarse en datos confiables —como los índices de precios por zona disponibles en plataformas como Plusvalía— permite ajustar el precio según el tipo de propiedad, ubicación y oferta existente.

1. Invierta en presentación

Las fotos son la primera impresión. Una propiedad limpia, bien iluminada y con una decoración neutra tiende a generar más clics y visitas. Pequeñas mejoras, como una mano de pintura, buen mobiliario (si es amoblada) o mantenimiento de grifería y cerraduras, pueden tener un gran impacto en la percepción de valor.

1. Publique en canales confiables y especializados

Utilizar plataformas inmobiliarias con amplio alcance y segmentación inteligente, como Plusvalía, garantiza mayor visibilidad entre los perfiles adecuados. Esto no solo mejora el número de consultas, sino también la calidad de los potenciales inquilinos.

1. Responda rápido y con información clara

En temporada alta, los interesados buscan inmediatez. Contar con una ficha técnica completa del inmueble, fotos actualizadas y disponibilidad para agendar visitas y consultar dudas es esencial para mantener el interés.

1. Asegúrate contar con el apoyo  de un corredor profesional o inmobiliaria

Contar con el respaldo de un corredor inmobiliario no solo ahorra tiempo, sino que también aporta seguridad al proceso. Estos profesionales conocen el comportamiento del mercado, filtran a los interesados, se encargan de la negociación y redactan contratos sólidos. Para el inquilino o comprador, también representa una garantía: saben que el proceso estará regulado, claro y respaldado por experiencia.

Fuente: Joseph Córdova, PLUSVALIA